-¡Agua!- a dúo.
-¿No queréis un zumo fresquitoooo?
-¡Agua!
-¿Qué queréis de tapa? – la chica muy amable se enrolla- ¡Hay flamenquines, hamburguesitas y chopo! ¡Más ricos….!
-Yo el animal- espeta el de tres
– Puagh…yo hamburguesa
– ¡Pero esto qué es!
-Hija, la hamburguesa
– Pero yo no quiero esto. Lo de él tiene mejor pinta.
– A ver, has dicho que no lo querías.
– Pero me he liado, pensaba que era otra cosa
– Hija, la hamburguesa es hamburguesa aquí, en Madrid y en todas partes
– Si, pero sin tomate, ni lechuga. ni pan, ni eso blanco
– O sea, ¿el cacho carne?
-Si
– Cómetela sin pan
– No, quiero lo de él
– Está muuuuy rico mami – calla y no metas el dedo en la llaga niño-.
– Buf… Come un poco, venga pequeña…
– Puaghhh. Tengo sueño, me quiero ir a dormir.
– Qué ricooo.
– Ya no puedo más.
– Tengo sueño…
– A ver, no te apoyes y no te duermas ahora
– No puedo máaaaas!!!
– Venga ya, a comer
– Estoy llenaaaaa
– Ven mosca, veeen amigaaaaa! Aquí tienes algo de comidita. ¡No, no te lleves el plato que es para mi amiga! – le dice a la amable señorita que retira las sobras – noooooooooo….moscaaaaaa!
– Hijo, calla y siéntate
– ¡¡Pero es mi amiga!!!
– Calla y come
– Toma aliento apestoso.
– Aghh…Jajajajaja…toma tú
– ¡Niños!
– ¡Apestosa!
– ¡Tú!
– ¡Niñooooos!
– Estoy cansadaaaa. Jo, ya sé que me he portado fatal, si es que no es justo. Es el peor día de mi vida. No hay helado, por supuesto.
– Pues mira, por supuesto que no.
– Claro, me lo imaginaba. Mira, seguro que si duermo un rato luego seguro, seguro estoy de mejor humor.
– Ya pero no sé si yo voy a estarlo. Come un poco de adobo
– Puaj!
– Apestoso!
– Cariño, no volvemos hasta que ésta haga la comunión.
– O más
– Y ¿tú porqué no me comes?
– No me encuentro bien…Come tú
– Yo ya no puedo más, estoy echo polvo. Tenemos comida para tres días
– Pide un tupper, anda…
-No hijo, no te levantes aún que tenemos que pagar por no haber comido, manda narices.
-Aaaaaaaaaahh
-Rodri espera
-Tengo sueño, no quiero andar
– Qué cansancio por Dios
-Me duele la espalda
-Mami, que no quiero andar hasta la esquina.
-Mira el coche.
-Nooooo!!!
-Hemos llegado
-Yo me quedo en el coche, vete tú con ellos
-Ya no tengo sueño, no quiero dormir ¡nunca más!
Hola. un domingo melillero como el mío pero en el norte… siempre pasa lo mismo cuando salimos a comer fuera… al final nada es tan idílico como nosotros nos podíamos imaginar… resignación y paciencia…. espero que esteis todos muy bien en vuestro nuevo destino. Seguimos en contacto
De verdad, no falla…Están espitosos, toca salir y empieza el dramón. Llegas a casa cabreado y no tienen sueño. Y así en moviola. Todo bien. UN beso grande!
Ay madre!!! Menudas tapas os dieron!!! Aunque lo de ir arrastrándolos ya me suena ya…Así fueron el domingo a la playa los mios,Hay veces que cogerías y les dirías ¡Alá quedaos que yo me voy!! Pero bueno poco a poco..Besos
Noooooo….las tapas nos las habíamos comido, eso eran las raciones, pero vamos, si llegamos a pedir más tenemos que vender en el mercado. Yo me hubiese levantado y lios hubiese dejado allí pasmados. A ver este fin de….Un besote!