Si alguien pensaba que poner un DVD para ver dibujos era cuestión de insertarlo, apretar un botón y ya se equivoca. Nada más lejos de la realidad y nada más complejo y sofisticado para un niño de 9 años con una visión del mundo particularmente rígida.
Lo mejor de esta labor que, aparentemente es simple, es que requiere de una complejidad cognitiva y de la sincronización de un montón de «variables» como:
– Coordinación ojo-mano (o dedo más bien)
– Motricidad fina
– Comprensión visual
– Comprensión auditiva
– Planificación
– Aprendizaje ensayo y error
– Memoria de trabajo
– Tolerancia a la frustración…
y más.
Teniendo en cuenta lo alteradas que están las funciones ejecutivas en el espectro el Autismo, para nosotros estas tareas alcanzan un nivel de logro que nos genera una satisfacción difícil de expresar mediante palabras.
Y sí, todo eso va implícito en el acto de poner un DVD en un reproductor.
Y no se hace de cualquier manera, no, porque en su afán y necesidad de tener el control de sus acciones hay todo un trabajo elaborado de planificación y segmentación.

Atentos:

– Comienza pidiendo los dibujos con un gesto suyo inequívoco, llevándose los dedos a la boca y trayendo la caja de DVD’s. Por ahí llegan las pistas…
– Voy a su habitación. Saco del cajón el mando y enciendo pantalla y reproductor.
– Abro la caja y elijo uno. Procuro hacerlo por orden.
– Le da al botón de extraer (lo intenta, voy guiando su dedo)
– Saca el DVD
. Le doy el nuevo. Le da un par de vueltas y lo pone en la bandeja.
– Lo encajo.
– Coloca el dedo para ver si acierta en el play.
– Coge el estuche.
– Cierra la puerta de la habitación.
– Apaga la luz.
– Mete el estuche en el cajón y lo cierra.
– Me choca la mano.
– Se sube a la cama y se ríe
– Esperamos los títulos de inicio para darle a «reproducir todo».
– Se baja de la cama, vuelve a coger el estuche del cajón, le da una vuelta y vuelve a guardarlo.
– Intenta darle al play. A veces le da a extraer por error y repetimos proceso. Aquí se me comienza a hinchar la vena.
– Comienzan los dibujos.
– Me choca las manos.
– Se ríe.
– Me busca para hacer un juego de ritmos nuestro con palmadas y besitos.
– Se sube a la cama, y a disfrutar.
Aquí puede pasar que 
A) Permanezca 40 minutos visionando los dos capítulos del disco o 
B) que empiece y no lo quiera, con lo que comienza la rabieta, saca la caja de DVD’s y vuelta a empezar.
Bienvenidos a una de las muchas tareas sistematizadas, rutinizadas, pautadas y previsibles de su mundo.
Esto no ha sido siempre así, para nada. Hasta hace unas semanas el pedir dibujos se traducía en rabietas, llantos y mandos volando por los aires.
También es nuevo el intento de apretar un botón utilizando un dedo. Nunca lo había hecho. Para facilitarle la tarea (ya que hay cuatro), le hemos señalizado el correcto.
TEA-logros-sistematización-rutinización-blog-madre
Cada vez va adquiriendo pequeñas competencias que para nosotros suponen un mundo.
Y sí, requiere dosis enormes de paciencia porque se equivoca de botón, se enfada, da golpes a la pantalla, muchas veces no le gustan los episodios, muchos DVD’s están rallados del uso (muchos años), me enfado, se enfada, nos reconciliamos, se ríe, grita de alegría y vuelta a empezar.
Celebremos estos pequeños pero inmensos logros, cada día.

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